Con anterioridad he hablado del amor, y sí, ella era la musa de aquellas palabras. Podríamos decir que ella es la fuente de inspiración de mi alma. Hubo un tiempo en que deje de pedir a Dios que me diese la oportunidad de hacerle feliz, es decir, tiré la toalla. Varias estrellas fugaces pasaron ante mí, y mi deseo seguía constante. Pero claro hubo momentos en los que decidí dejar de pedirlo porque pensaba: "Cómo una persona como ella puede fijarse en alguien como yo" pues ya veis... Os preguntareis porqué escribo esto, por dos razones:
- Porque quiero que esa persona vea que hago público lo mucho que siento por ella, lo mucho que la quiero y que jamás en mi vida podré olvidar lo bonita que es la vida a su lado.
-Y por otra parte-
- Es un mensaje de esperanza para aquellos que tiraron la toalla por aquella persona a la que, de corazón, aman. Oye recoge esa toalla, sécate el sudor y lucha por esa persona que seguro que se lo merece.
Y a ti, sí. Tú que me hace tan feliz...GRACIAS. Gracias por aparecer en mi vida, gracias por aceptar mi pocas virtudes y mis muchos defectos (dejo mucho que desear...), gracias por mostrarme lo bello que es amar, gracias por dejarme hacerte feliz.
No sabes bien, lo importante que es para mi esta oportunidad. Llegaste cuando más te necesitaba, Dios te puso en mi camino el 1 de Septiembre del año 2012 y tras un año de cariño, de paciencia, y de esperanza (y como no, de amor hacia a ti); el día 30 de agosto del año 2013 aceptaste caminar junto a mí en el sendero de la vida. Sabes bien que caminar juntos no es fácil, pero a su vez el caminar juntos en la distancia lo complica más, pero sé que el amor que nos une es mucho más fuerte que la distancia. Por eso te pido paciencia y comprensión. Sabes bien que cada segundo separado de ti se me hace un minuto, los minutos horas; las horas, días; los días, meses...Y así, sólo puedo pedirte que espero que cuando vuelvan a cruzarse nuestras miradas, sean de felicidad, ya que nuestros camino (gracias a Dios) volverán a unirse todas las semanas, por muy breve que sea el encuentro.
Te recuerdo aquel favor que te pedí y que no quiero que olvides jamás: "El día que deje de hacerte feliz, avisa, porque prometo que cambiaré lo que haga falta para convencerte de que nada, ni nadie podrá separarnos" Te prometo fidelidad, amor, sinceridad, cariño y más amor... AMANDO HASTA EL EXTREMO!!
Y ahora la parte ñoña (por si todavía pensabas que no se podía ser más ñoño): " Soy el hombre más afortunado del mundo porque tengo una familia maravillosa, una novia perfecta y ella trae consigo una familia maravillosa ¿qué más se puede pedir?
Y ahora, después de expresar mis sentimientos, me hago una pregunta:¿Qué haría yo sin ti?
